Hermes Trismegisto
Señalar que amén del Hermes-Mercurio clásico, la Tradición Hermética posee su nombre por Hermes Trismegisto, tan presente en los primeros siglos de nuestra era en Alejandría, denominación que no sólo se refiere al número de distintas deidades o su aparición cronológica sucesiva, sino que indica Hermes "tres veces grande" y se atribuye a este numen, curiosamente, la posesión de las tres cuartas partes de la Sabiduría Universal.
Tú, que habitas el inexorable sendero del Cocito, impuesto por el destino, que guías las almas de los mortales al fondo de la tierra, Hermes, hijo de Dioniso, que danza con delirio báquico, y de la doncella pafia, esto es, de Afrodita de ojos vivos, que frecuentas la sagrada mansión de Perséfone, asistiendo a las almas de funesto sino, bajo tierra, como acompañante, a las que conduces, cuando les llega el día fijado de su destino, porque todo lo seduces, hipnotizador, con tu caduceo mágico, y de nuevo despiertas a los que están dormidos. Pues te dio la diosa Perséfone el honor de acompañar a las almas eternas de los mortales por el camino que lleva al ancho Tártaro. Bienaventurado, envía, pues, te lo ruego, a tus iniciados un fausto final a sus labores. (Himnos Órficos LVII: "A Hermes Infernal").

Hermes Trismegistus,
Trois anciens traictez de la philosophie naturelle.
Charles Hulpeau, Paris, 1626.